Descubren un capítulo oculto de la Biblia escondido en el Vaticano
Se trata de un manuscrito oculto en la Santa Sede, datado en 1500 años de antigüedad, descubierto por científicos de la Universidad de Cambridge.
El hallazgo de un capítulo oculto de la Biblia en una biblioteca secreta del Vaticano, que data de más de 1500 años, fue realizado por científicos de la Universidad de Cambridge.
Hallazgo inédito
El hallazgo fue publicado por el científico Grigory Kessel en la prestigiosa revista New Testament Studies. El texto, que se presume es una copia de pergamino de los Santos Evangelios del Nuevo Testamento bíblico, fue descubierto entre dos capas de hojas que eran ilegibles a simple vista.
Los pasajes bíblicos descubiertos pertenecen al evangelio de Mateo y datan del siglo III después de Cristo. Se trata de la traducción siríaca de los capítulos 11 y 12, que relatan la historia de Juan el Bautista, una figura reconocida en la tradición católica por su papel en el bautismo de Jesús.
Así hallaron el texto
El avance en la identificación de los textos ocultos fue posible gracias al uso de fotografía ultravioleta. Este método permitió capturar textos que no eran visibles a simple vista. Grigory Kessel, de la Academia Austriaca de Ciencias y autor del estudio, utilizó esta técnica para revelar el contenido de las capas de hojas ilegibles en la biblioteca escondida del Vaticano.
"Hasta hace poco, solo se conocían dos manuscritos que contenían la traducción siríaca antigua de los Evangelios. Uno se encuentra en la Biblioteca Británica de Londres y el otro fue un palimpsesto descubierto en el Monasterio de Santa Catalina en el Monte Sinaí. Recientemente, se desenterró un tercer texto", explicó el científico.
Primeras traducciones
En tal sentido, Kessel concluyó que el manuscrito hallado "da fe de la versión en siríaco antiguo y ofrece una puerta de entrada única a la fase más temprana en la historia de la transmisión textual de los Evangelios".
El Dr. Garrick Allen, profesor titular de estudio del Nuevo Testamento de la Universidad de Glasgow, comentó que este descubrimiento puede proporcionar una idea más clara de las primeras traducciones de la Biblia y las comunidades que las produjeron.
Fuente
cronista.com
Créditos Imagen
Istock